Cristina C. Ugidos Pues sí, no lo voy a negar, a mí también me encantan las botas Hunter. Pero antes de que la fiebre ‘in’ llegase a nuestras vidas, las conocíamos como katiuskas. Botas de agua, perfectas desde diciembre hasta abril. Sobre todo si vives en el norte de España. Pero desde hace un tiempo la locura por las katiuskas se ha vuelto ‘trending topic’ a nivel mundial. ¿La culpa? La marca escocesa que nació en 1855 y ha logrado conquistar a las celebrities a lo largo y ancho del planeta.
Llega la lluvia y pensábamos en botas de agua, ahora cualquier época del año es buena para ponerse unas Hunter. Sí, como lo oyes, últimamente el estilo ya va hasta con vestidos totalmente veraniegos. Y no es que todas nos las podamos permitir, esa es la realidad. A veces los precios se salen un poco de la economía doméstica del mortal común y corriente. Pero entran en acción las ‘celebrities’, ellas sí que saben.
Si no que se lo digan a Kate Moss, una foto suya en el festival de Glastonbury 2005 -ya llegaremos a él- y ha creado tendencia. Bueno, no es una novedad que Kate Moss crea tendencia se ponga lo que se ponga (espero que nunca apueste por el proverbial saco de patatas), pero fue de escándalo. Pantalones cortos (a ser posible minis), combinados con un top o camiseta. Añádele un chaleco o o una cazora si el clima lo pide. Si al look le incorporas unas gafas, cinturones, pulseras y las botas bien embarradas, tienes el estilo perfecto para casi cualquier festival del mundo.
Pues sí, podemos decirlo alto y claro, el festival de Glastonbury en Somerset se ha convertido en la pasarela casi perfecta de la marca Hunter. Millones de personas -muchas de ellas famosas- se dan cita cada junio en un festival que es más que música, es barro y es Hunter.
La locura alcanza una nueva dimensión cuando aparecen accesorios para tus accesorios. Como lo lees. Los calcetines exclusivos para llevar con Hunter. El otro día una amiga me comentaba que estuvo a punto de comprarse unos, hasta que el precio de los susdichos era casi tan alto como el de las botas en rebajas. ¿A dónde vamos a llegar? Que le da otro estilo, sí, claro, no lo negamos, pero me parece que pagar 40 euros por unos calcetines es un poco excesivo. Eso sí, quedan monísimos.
Además de otros productos que tiene la marca, como botas bajas o con taconos, para hombre o niños, y una de mies prendas favoritas: los chubasqueros. No puedo negar que siento más que una leve atracción por los accesorios de la marca, los chubasqueros me encantan y las mochilas me parecen una pasada, hasta que me piden 300 euros por ellas. En fin, no hay mejor publicidad que los famosos lleven tus prendas, pero sin lugar a dudas, Hunter sabe lo que hace.
