Los maragatos de la Batalla de Medina de Rioseco

Mucho se ha dicho y escrito sobre el desastre de la batalla de Medina de Rioseco, o del Moclín. Aquel 14 de julio de 1808 los ejércitos castellano y gallego, mandados por el General Cuesta y el General Blake respectivamente plantearon uno de los peores despliegues de la historia militar ante las tropas de Bessières.

Aquello fue una auténtica escabechina. El peor parado sin duda fue Joaquín Blake que perdió toda su artillería y alrededor de 3.000 hombres, mientras que en el bando francés apenas se contaron 500 bajas. Pero los hombres que ocupan estas líneas se encontraban con el ejército de Cuesta. Entre todos los reclutas bisoños que la Junta de León había reunido estaban los maragatos de Clavijo. Un batallón compuesto por astorganos y paisanos de las cercanías de la ciudad que mal instruidos y peor reglados fueron arrastrados al desastre de Medina.

Aquellos arrogantes maragatos sin uniformes ni bandera decidieron que si debían enfrentar al francés lo harían defendiendo al menos una enseña de su ciudad. El viejo Pendón de Clavijo sería cedido por el Corregidor de la ciudad y los reclutas astorganos juraron su defensa con su sangre como aval.

Durante la batalla los de la enseña de los Osorio no tuvieron demasiado trabajo, pero con la línea de Blake colapsada, al final de la contienda les tocó entrar en acción. Cuesta debía retirar sus tropas y sus piezas de artillería para salvar algo de aquel desastre. Los 800 de Clavijo avanzaron con la bayoneta calada bajo el fuego graneado francés y consiguieron mantener las acometidas de los mandados por Bessières el tiempo suficiente para que el ejército de Castilla pudiese replegarse.

No fue el acto más heroico de la Guerra de la Independencia, ni el más destacable, pero aquellos reclutas «voluntarios», de los cuales surgiría el cuerpo de Voluntarios de León, regresaron a casa con la promesa cumplida. Devolver al consistorio el Pendón de Clavijo que con más orgullo y gallardía que experiencia ondeó en la Batalla del Moclín.

Recreadores en Astorga recordando a los 800 de Clavijo

Deja una respuesta