‘The Walking’ Dead amplía fronteras

Que el primer episodio de la séptima temporada de The Walking Dead iba a ser duro, muy duro, era de esperar. Sin embargo, son muchos los espectadores que además lo han calificado de hiriente… ¿Se les fue la mano a los guionistas? La muerte de Abraham para despistar sobre la que vendría a continuación, la del padre de familia y protagonista desde la primera temporada, Glenn, también ha irritado a parte de la audiencia.

Pero ello no significa que no tengamos ganas de saber cuál va a ser el próximo paso del grupo, rendido y destrozado tras la muerte de sus compañeros a manos de un malísimo Negan y de su ‘compañera’ Lucille, durante una noche y una madrugada de violencia explícita y exacerbada.

Y es que en el segundo capítulo no tuvimos noticias de ellos, pues la acción pasó a centrarse en torno a dos de los personajes ausentes en el estreno, Carol y Morgan, que acaban la sexta temporada auxiliados por unos jinetes armados tras enfrentarse a muerte con uno de Los Salvadores de Negan.

Ahora, Carol y Morgan  han llegado en este segundo capítulo, titulado The well– el pozo-,  a El Reino, un pueblo postapocalíptico sostenido por una serie de símbolos y liturgias, que funciona gracias a la cooperación de todos, un lugar que Carol no duda en calificar como «un circo», con un autoproclamado monarca, Ezekiel, que aparece acompañado en todo momento por su tigresa Shiva. ¿Les suena?…. claro, no en vano el personaje procede de una de las fuentes en las que habitualmente beben los guionistas, el cómic, en este caso de Robert Kirkman.

En fin, un «circo» en el que todo parece funcionar a la perfección, y eso que Ezekiel no es más que una persona común -como le confiesa en un arranque de sinceridad a Carol-, llegado al trono tras un pasado de lo más corriente, que no desvelaremos por quienes aún no han visto este capítulo, en cuyo final, además, los guionistas nos mandan señales de una posible nueva relación amorosa…

Pero la sombra de Negan, el supervillano de esta temporada, es alargada, y también se cierne sobre El Reino, que paga con buena parte de su producción a Los Salvadores, si bien la naturaleza de la relación entre ambas comunidades no nos es del todo desvelada, más allá de alguna pincelada que nos da a entender que, desde luego, cordial no es.

Y así llegamos al tercer capítulo, The Cell, que se emitirá el lunes 7 de noviembre, en el tampoco parece que tampoco sabremos mucho más de Rick y su grupo, pero sí del destino de Darryl, que nos servirá para conocer más de El Santuario, el hogar de Negan y sus soldados-asesinos.

 

 

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