La plataforma digital ‘Vogue Runway’, encargada de retransmitir contenido ligado a los desfiles y calendarios de la moda en directo retomaba de cara a esta semana de la Alta Costura de París, celebrada del 25 al 28 de enero, el hashtag #VoguePhygitalRunway, bajo el que aglutinar en Instagram todo tipo de publicaciones sobre desfiles de moda celebrados siguiendo esta vertiente.
Un término que ya introducía el pasado marzo el British Fashion Council -organización que promueve diseñadores y eventos de moda en el Reino Unido-, cuando anunció que las siguientes semanas de la moda se acogerían al formato ‘phygital’, haciendo que este nuevo vocablo se abriera camino como una alternativa que, cimentada en lo digital, mantiene elementos de lo físico.
Combinando presentaciones presenciales que extreman medidas de aforo y seguridad con piezas audiovisuales como entrevistas a diseñadores o documentales sobre procesos creativos y de confección, ya son varios los países, semanas de la moda y firmas los que se han posicionado a favor de lo ‘phygital’.
El formato mantiene el halo de exclusividad intrínseco a presentaciones de moda de casas de costura y también se beneficia de las posibilidades de difusión y creatividad que ofrecen las piezas audiovisuales, abriendo una ventana hacia el mundo de la moda que, habitualmente, quedaba reservada a unos pocos prescriptores tras invitaciones exclusivas.
En septiembre, semanas de la moda del circuito internacional como Londres, Nueva York, Milán, París o la española Mercedes-Benz Fashion Week Madrid se acogían a esta modalidad durante el mes más significativo para esta industria, ofreciendo las primeras colecciones expuestas vía ‘phygital’.
Aforos reducidos para las presentaciones, uso obligatorio de mascarillas, implantación de distancias de seguridad y medición de la temperatura imperan en la asistencia a pequeños eventos, que son emitidos en directo de forma complementaria a otro tipo de contenidos que, aunque no son plenamente inmersivos, intentan acercar el espectador a las firmas.
Un puente entre el universo digital y el tangible que se erige como solución definitiva para expandir los universos creativos del mundo de la moda que, lejos de tambalearse, se reconvierten en pos de avanzar.