EBD Las autoridades del condado de Marín, en la bahía de San Francisco, donde Williams residía, indicaron que los primeros indicios señalan que se trató de un suicidio por asfixia. Los servicios de emergencia recibieron este lunes, 11 de agosto, a las 11:55 horas -hora local, en España las 18:55-, una llamada para acudir a la residencia del actor en la pequeña localidad de Tiburón.
Cuando llegaron a la vivienda no pudieron hacer nada por salvar la vida de Williams, quien fue declarado muerto en el lugar.
El actor fue visto por última vez con vida en la casa en la que falleció y en la que vivía con su tercera esposa a las 22:00 horas – hora local- del domingo. Según la prensa local, Williams había ingresado en julio a un centro de rehabilitación. En el pasado, el actor había sufrido sido problemas de adicción a las drogas y el alcohol y desde hace años estaba sumido en una depresión de la que no conseguía salir.
La familia pide privacidad y respeto
La mujer de Williams, Susan Schneider, publicó ayer un breve comunicado en el que pidió que se respete la privacidad de la familia. «Esta mañana perdí a mi esposo y a mi mejor amigo, al tiempo que el mundo perdió a uno de sus artistas más queridos y a un ser humano maravilloso», señaló Schneider en la nota.
«En nombre de la familia de Robin pedimos privacidad en un momento de un profundo dolor. Mientras se le recuerda, esperamos que el foco no esté en la muerte de Robin, sino en los incontables momentos de alegría y risa que dio a millones de personas», concluye el comunicado.
Óbama lamenta la pérdida
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama dio sus condolencias a la familia: «Williams llegó a nuestras vidas como un alienígena, pero terminó tocando cada elemento del espíritu humano».
«Nos hizo reír, nos hizo llorar. Entregó su inconmensurable talento libre y generosamente a quienes más lo necesitaban: desde nuestros soldados estacionados en el extranjero hasta los marginados en nuestras propias calles», agregó el mandatario.