L. Sierra El diseñador Hannibal Laguna (Caracas, Venezuela, 8 de octubre de 1967) celebra en la XX edición de la Pasarela de la Moda de Castilla y León que se celebra en Burgos sus 30 años en el mundo de la moda. Tres décadas vistiendo a una mujer elegante y llena de lujo que le han “dado todo” en una profesión “nada fácil” de la que ahora hace balance.
Llega a la Pasarela de la Moda de Castilla y León, ¿qué le parece?
Me parece un certamen maravilloso que es todo un referente nacional y no hay más que ver esta edición. Es necesario que se lleven a cabo estas iniciativas para poder apoyar a la moda y me llena de satisfacción que las instituciones apoyen estas ideas.
Treinta años. Una cifra redonda. ¿Cómo se hace balance de tres décadas?
Han sido tres décadas destinadas a vestir a una mujer femenina, romántica y llena de energía, y de alguna forma creo que hay que celebrarlo. Es mucho tiempo en un mundo que no es nada facil y hemos pasado por épocas complicadas como los años 90 cuando imperó el minimalismo y la masculinización de la mujer. En esa época tuvimos que defender lo que el tiempo nos ha dado la razón, que es la libertad de estética donde cada mujer y cada hombre se identifican con lo que llevan.
Y esos años se repasan en Burgos
Sí. En esta ocasión presento ‘Hannibalísimo’ que de alguna forma repasa esa historia de la firma con un desfile dividido en tres partes donde vemos la adolescencia de la marca, la adolescencia y la madurez. En el nacimiento veremos los primeros vestidos hechos con flores con una flor que fue la primera que confeccioné con 9 o 10 años y que encontramos en una caja de recuerdos de mi madre. Esa flor se sobreexpone en neopreno en tejidos cortados al láser lo que denota algo actual y que hubiera sido imposible de hacer hace años. Luego veremos mi adolescencia con corpiños y con vestidos cortados al bies, y acabaremos con todo un mundo floral pintado a mano y digitalizado en telas como el mikado o la organza de seda. Algo muy novedoso. Las flores están presentes porque siempre han sido un motivo de inspiración para mi.
Hemos visto desfilar con toda la ilusión a los jóvenes creadores, ¿recuerdas cómo fueron sus inicios? ¿Qué consejos le daría a quien ahora se inicia en el mundo de la moda?
Me acuerdo mucho. Yo siempre digo que cuando el talento ya está probado es algo fundamental y con esfuerzo se consigue lo demás. En mi caso fue todo una cuestión de trabajo pero si no me hubiera presentado a los certámenes no hubiera sido lo que ha sido mi trayectoria. En uno de los concursos tuve un golpe de suerte que hizo que Paco Rabanne me seleccionara para representar a España con un desfile magnífico en Miami. Mi carrera comenzó en Estados Unidos y luego vino lo demás.
¿Y cómo es la mujer que viste Hannibal Laguna?
Son mujeres que visten prendas especiales. Yo estoy al servicio la mujer y mi cometido es hacerlas más bellas. Me gusta verter a la mujer en una ocasión única y especial. Una mujer es probable que no pise nunca una alfombra roja pero estoy seguro que sí pisará una alfombra blanca. Para mi la moda nupcial ha sido muy importante en un momento de mi carrera cuando veía como las clientes venían a mi casa a pedirme que les confeccionara su vestido de novia porque no encontraban lo que buscaban. Era un momento en el que no existía moda nupcial ni había pasarelas de moda nupcial.
¿Y cómo fue ese salto hacia el mundo nupcial?
Pues de una forma casual. Me vi en la tesitura de tener que albergar muchos modelos de novia en un espacio muy reducido y aposté por el corpiño con falda. De ese modo, nunca pensé que crearía una tendencia, sino en que podría tener cien modelos distintos en un espacio físico mucho menor. Fue algo revolucionario y a partir de ahí nació la moda nupcial en la primera feria nupcial que se celebró en Barcelona.
Sus creaciones siempre se han dirigido a una mujer elegante y muy sofisticada en una clara ligazón del lujo y la mujer. ¿Sigue manteniendo esa combinación?
Sí, las colecciones de costura han sido el motor de mi vida porque me permiten disfrutar con lo que hago sin tener límites de coste o precio. Pero hay una realidad y es que hay que producir otras piezas. Cuando ya has vestido a todas las actrices en todas las alfombras rojas, necesitas algo más. Y ese es el proyecto que comencé hace siete años consistente en que el universo Hannibal Laguna esté presente en un amplio abanico. Hablo de una línea de viajes y óptica donde el concepto es distinto y accesible a todos los públicos.
Habla de que ha vestido a “todas las actrices en todas las alfombras”…¿No le queda nadie por vestir?
Sí. Una gran mujer que es emblema de mi firma. A la gran Sofía Loren que encarna a la mujer en la que yo me inspiro. Una mujer orgullosa de su físico y una gran profesional, además de persona.
