El respeto medioambiental, la investigación y la innovación están transformando la moda en algo más que una simple tendencia. Ahora, las prendas pueden neutralizar el olor corporal, aportar frescor en días cálidos, limpiar el aire de virus, repeler mosquitos y emitir señales de socorro.
Durante años, la moda ha estado marcada por el exceso: compras compulsivas, prendas desechables y la búsqueda constante de ofertas. Sin embargo, este enfoque está cambiando.
Hoy, la industria se dirige hacia un nuevo paradigma que prioriza la calidad y el respeto al medio ambiente. Algunas empresas ya están implementando esta filosofía. Un ejemplo es Sepiia, fundada en 2016 por el ingeniero Federico Sainz. Esta firma utiliza tecnología para crear tejidos que maximizan la durabilidad de las prendas, reducen manchas y olores, y eliminan la necesidad de planchado.
La tecnología de secado rápido de Sepiia permite que las prendas se utilicen inmediatamente después de lavarlas. «Nuestras prendas están diseñadas para ahorrar tiempo y recursos», añade Sainz. También han incorporado partículas de biocerámica en sus productos, las cuales reducen el estrés y el cansancio, y partículas de plata que evitan la proliferación de bacterias causantes del mal olor, prolongando la frescura de las prendas.
Uniqlo, por su parte, ofrece prendas con protección solar y diseños pensados para toda la familia, permitiendo disfrutar de actividades al aire libre con seguridad.
Greener es otra marca que se enfoca en la moda sostenible. Sus prendas, confeccionadas con algodón ecológico, lino y poliéster reciclado, purifican el aire de gases de efecto invernadero, virus y bacterias. «El proceso es similar a la fotosíntesis, purificando el aire las 24 horas del día», explica la empresa en su web. Todas sus prendas son antimicrobianas y bactericidas, eliminando los malos olores.
Stingbye, especializada en textiles, ha desarrollado prendas que repelen mosquitos, piojos, pulgas, chinches, garrapatas y ácaros, utilizando un repelente que dura hasta cien lavados.
La integración de moda y tecnología ha dado lugar a tejidos inteligentes que incorporan LED, sensores y microchips, transformando las prendas en dispositivos avanzados. La empresa española Pykrs ha presentado la parka X-Treme, una chaqueta inteligente para viajeros urbanos, ciclistas y motociclistas, equipada con tecnología electroluminiscente para mejorar la visibilidad, elementos calefactores de fibra de carbono y un sistema de detección de caídas con GPS, todo controlable mediante una app o control remoto.
Existen también prendas interactivas que cambian de color según el estado de ánimo, reproducen música con un simple toque, y monitorizan la frecuencia cardíaca, las calorías consumidas o el número de pasos, actuando casi como entrenadores personales. Además, el mercado ofrece abrigos que se calientan cuando baja la temperatura y chaquetas que se ventilan cuando sube.
Esta nueva era de la moda inteligente no solo busca la funcionalidad, sino también el bienestar y la sostenibilidad, respondiendo a las necesidades de un mundo en constante cambio.